Ciclismo: El polaco Rafal Majka (Tinkoff-Saxo) estuvo a la altura de su papel de favorito en la primera etapa de montaña de la Vuelta a Polonia. Con su victoria de ese día, casi se aseguró el liderato en la clasificación general, como resultó más tarde.
En condiciones adversas, los corredores tuvieron que subir hasta el destino de Strpske Pleso en tres ocasiones, aunque al final aún quedaban algunos kilómetros más por subir. Esto no pareció molestar a un grupo de ocho que partieron pocos kilómetros después de la salida en Zakopane. También estuvo representado Mateij Paterski (CCC Polsat), que sumó los primeros puntos de la jornada en la clasificación de montaña.
Sin embargo, el grupo no tuvo nada que ver en el resultado de la etapa, a pesar de una ventaja máxima de tres minutos. En los últimos diez kilómetros, los favoritos estaban todos al frente del campo. Y el checo Petr Vakoc (Omega Pharma-QuickStep), que hasta ese momento había sido líder de la clasificación general, también pudo seguirle el ritmo hasta dos kilómetros antes de la meta. Luego, el ganador del año pasado, Pieter Weening (Orica-GreenEdge), se puso serio. Sin embargo, no logró convertir su ataque en un éxito.
A falta de 800 metros para el final, Andrej Amador (Movistar) devolvía la ventaja al holandés. Tras ello, Benat Intxausti, su compañero de equipo, abrió el sprint. Hasta pocos metros antes de la meta, en un principio parecía el ganador seguro. Pero Rafal Majka aún logró asegurar la victoria del día. El tercer puesto fue para Jon Izaguirre (Movistar).
Majka es el primer polaco en diez años en ganar una etapa en su gira local. La alegría de esta victoria también irradió a los organizadores, quienes inicialmente pensaron que él era el nuevo líder general después de la carrera. Sin embargo, más tarde tuvieron que revisar este resultado. Majka es segundo aquí, un segundo detrás de Vakoc. La dupla de Movistar Intxausti e Izaguirre le siguen a cinco segundos.
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