Ciclismo: La tercera etapa de la Vuelta a Bélgica fue abandonada tras un choque masivo provocado por motos de escolta. Muchos conductores cayeron y algunos resultaron gravemente heridos. Stig Broeckx, profesional de Lotto-Soudal, fue trasladado en helicóptero al Hospital Universitario de Aquisgrán con heridas graves en la cabeza.
'Otra vez' uno se inclina a decir con el mensaje de hoy, que nos llega desde Bélgica. Una vez más, los vehículos de escolta provocan una grave caída en el ciclismo profesional y, como consecuencia, se producen de nuevo lesiones graves entre los ciclistas. El curso exacto del accidente aún no está claro, pero aparentemente dos motocicletas de escolta chocaron unos 65 km después del inicio de la tercera etapa del Tour de Bélgica, luego se deslizaron sobre la carretera y entraron en el campo de ciclistas. Las pesadas máquinas tiraron al suelo a decenas de conductores a gran velocidad.
Stig Broeckx de Lotto-Soudal parece haberlo tenido particularmente difícil. El belga sufrió graves heridas en la cabeza y fue trasladado de inmediato en helicóptero al departamento de neurología del Hospital Universitario de Aquisgrán. Las primeras fuentes hablan de hemorragia cerebral y fracturas en la cara. Según el equipo, el profesional de Giant Fredrik Ludvigsson se rompió el hueso navicular y está fuera por el momento. Por el momento no se sabe nada sobre las lesiones de los otros conductores.
La UCI comentó poco tiempo después en Twitter y se refirió a la normativa introducida recientemente con respecto a los vehículos de escolta y se comprometió a investigar el accidente de cerca y verificar si hubo algún comportamiento ilegal. Es probable que el grave accidente vuelva a encender la discusión después de que algo de calma haya regresado a las cosas, poco más de dos meses después del accidente fatal de Antoine Demoitié en Gent-Wevelgem.
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