Prueba: Todo el mundo conoce el problema de encontrar la protección perfecta para el zapato cuando los días de carreras o entrenamiento lluviosos son inminentes. Por esta razón, echamos un vistazo más de cerca al RaceAqua del fabricante danés GripGrab.
Al ponérselos por primera vez, se notó el muy buen ajuste: el cubrecalzado se asienta sobre los zapatos de ciclismo como una segunda piel. Dado que eres reacio a prescindir de la aerodinámica en la carrera a pesar de los cubrezapatillas, GripGrab ha elegido este ajuste ceñido para RaceAqua y, por lo tanto, ha hecho que el cubrezapatillas sea adecuado para las competiciones. El material superior de nailon y poliuretano ofrece una protección óptima contra el agua y el viento. Solo después de unos pocos kilómetros bajo la lluvia sentí que el agua se metía lentamente en mi zapato. Esto no se debió a la calidad del material, sino a las aberturas requeridas para el cubrecalzado; aquí debe hacer algunos compromisos en términos de protección contra la intemperie. Sin embargo, gracias al ajuste apretado, es notablemente más difícil que penetre el agua.
El bajo peso y el material no absorbente aseguran que el RaceAqua no sea una carga incluso bajo la lluvia y sea cómodo de llevar en todo momento. La cremallera en la parte trasera hace que sea fácil de poner y quitar. La parte superior de la cintura y la parte inferior están hechas de un material reflectante, un buen plus de seguridad en condiciones de visibilidad adversas.
Limpiar los zapatos es un poco engorroso: GripGrab recomienda simplemente limpiar los cubrezapatos con un paño húmedo y no lavarlos en la lavadora. Debe considerar si la variante negra no es una mejor opción que la blanca. La humedad después de algunos paseos de entrenamiento dejó huellas visuales claras en nuestro modelo de prueba, que ya no podían eliminarse ni siquiera lavándose las manos.
De un vistazo: GripGrab RaceAqua
- ajuste de carrera
- Viento e impermeable
- reflectores
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