Novedad: Diríjase una vez en bicicleta a los picos de los Alpes en el aire limpio de la montaña o incluso haga una travesía alpina en medio de un paisaje idílico. Este es el sueño de muchos ciclistas aficionados. Las bicicletas eléctricas ahora están haciendo realidad este sueño para más y más personas. Sin embargo, la explosión del cicloturismo se está convirtiendo en un problema creciente. Organizaciones ecologistas como Bund-Naturschutz en Bayern (BUND) piden ahora que se regule el uso de bicicletas eléctricas en la región alpina. Entonces, ¿pronto llegará una prohibición de bicicletas eléctricas?
Prohibición de bicicletas eléctricas en la montaña: el problema
Bueno, los Alpes y otras altas cadenas montañosas han conservado su naturaleza salvaje y sus vistas panorámicas imperturbables por una sola razón: el camino solía ser tan difícil que solo unas pocas personas se han aventurado en estas áreas. Especialmente no en bicicleta. Estos lugares anteriormente solo estaban reservados para los pocos ciclistas que estaban realmente en forma.
Sin embargo, gracias a la revolución de las bicicletas eléctricas, las sensibles regiones alpinas ahora son accesibles para un número cada vez mayor de ciclistas. Y con la multitud viene el daño duradero de la basura, la molestia de los animales o el daño a la vegetación de los senderos salvajes. Thomas Frey, oficial regional y director gerente del grupo de trabajo regional BUND para los Alpes, pide por lo tanto que se regule el uso de bicicletas eléctricas como reacción a la "actualización" en el segmento de bicicletas eléctricas.
Ciclismo de montaña eléctrico solo en senderos especiales
El objetivo de la BUND es que las bicicletas eléctricas ya no puedan circular por ningún camino en terreno alpino. En cambio, el uso debe limitarse a rutas definidas para proteger la naturaleza sensible tanto como sea posible. Para que todo se implemente de manera efectiva, el cumplimiento de la regulación debe ser supervisado por los administradores del área, los guardabosques, la vigilancia de la conservación de la naturaleza, los guardabosques y otros empleados de las instituciones locales.
Sorprendentemente, la propuesta actual no menciona sanciones por incumplimiento. Por lo tanto, los conservacionistas confían en la percepción de los ciclistas. Sin embargo, la realidad del tráfico rodado muestra que la falta de sanciones no conduce a ningún cambio significativo en el comportamiento. ¿Qué opinas sobre el tema? ¿Las bicicletas eléctricas tienen que estar reguladas en terreno alpino o todo el mundo debería seguir montando libremente? Haznos saber.
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